sábado, 24 de octubre de 2009

El poder de Dios

En una clase de religión, vimos una película cuyo nombre no recuerdo pero tenia un mensaje muy importante. Se trataba de una familia conformada solo por el esposo y la esposa que no podían tener hijos ya que el hombre era estéril. Ambos afrontaban por problemas económicos ya que los sueldos de ambos no eran suficientes; uno era entrenador de baseball, y la otra era vendedora de flores. Al señor no le iba bien en su trabajo pues el grupo al que el entrenaba no ganaba ningún partido hace un buen tiempo, por esta razón, algunas autoridades del colegio lo querían despedir porque pensaban que el era la causa del fracaso de sus jugadores. El escuchó estos comentarios y se encontraba desesperado pues pensaba que Dios se había olvidado de el porque le iba mal en el trabajo y en la vida familiar. Un seguidor de Dios, habló con él y le dijo que tenía que aceptar a Dios en su corazón de verdad, quererlo, respetarlo y ser parte del cambio que Dios propone para cada uno de nosotros. El señor aceptó a Dios como su guía y su esperanza, cuando lo hizo su vida cambio. Siempre él le decía a sus jugadores que lo más importante en el juego es ganar, pero pronto se dio cuenta que ese no era el objetivo tanto del juego como en la vida, el verdadero objetivo es vivir y hacer las cosas que Dios nos encomienda, confiar en el y honrarlo como padre que es de toda la humanidad. Cuando puso en practica eso. su vida cambio. Su equipo ganaba los partidos porque antes de jugar oraban agradeciendo a Dios por estar vivos y por permitirles jugar y que se haga su voluntad. Pronto los jugadores aceptaron a Dios en sus vidas y hacían lo correcto para agradar a Dios, luego los profesores cambiaron su forma de ver las cosas y después, los padres pues imitaban a sus hijos. El había logrado cambiar a mucha gente que ahora se comprtaban como verdaderos hijos de Dios.
Esta película me hizo reflexionar ya que me puse a pensar en lo grande que puede ser Dios como para cambiar vidas completas. Me puse a pensar, como seria sentir que Dios habita en los corazones y lo bien que se sentiría poder compartir su palabra para que los demás cambiaran su modo de pensar y actuaran conforme a lo que Dios quiera que pase en nuestras vidas. Al compartir esto con mi familia me dijeron que Dios es amor y que es por esa razón que cuando uno lo acepta como su único salvador y guía, la vida cambia radicalmente pues él actúa como una lámpara en un camino oscuro. Dios quiere lo mejor de cada uno, quiere que lo adoremos y lo escuchemos para que nuestra vida pueda ser mejor.

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